En la travesía del crecimiento de nuestros hijos, la vacunación emerge como un pilar fundamental para resguardar su salud y bienestar. A los 5 años, cuando muchos dan sus primeros pasos en el mundo escolar, es crucial aprovechar la oportunidad para inmunizarlos contra diversas enfermedades infecciosas que pueden tener consecuencias graves. Más allá de ser una responsabilidad parental, la vacunación se erige como un acto solidario que contribuye a la preservación de la salud familiar y comunitaria.
En este crucial momento de la niñez, es esencial tener presente que la vacunación no solo protege al individuo que la recibe, sino que también juega un papel fundamental en la construcción de una barrera colectiva contra distintos tipos de enfermedades. En este sentido, el ingreso al ámbito escolar a los 5 años marca un hito en el calendario de vacunación, donde se deben administrar varias dosis para garantizar una protección efectiva.
Entre las vacunas recomendadas para niños de 5 a 6 años, se encuentran:
- IPV (Vacuna Inactivada contra la Poliomielitis): Una defensa eficaz contra la poliomielitis, una enfermedad que puede causar parálisis irreversible.
- Triple viral SRP: Esta vacuna combate el sarampión, la rubéola y las paperas, brindando una protección integral contra estas enfermedades altamente contagiosas.
- Triple bacteriana celular: Una herramienta esencial para prevenir la difteria, el tétanos y la tos convulsa, salvaguardando a los niños de enfermedades potencialmente mortales.
- Varicela: La vacuna contra la varicela, que protege contra esta infección cutánea, evitando complicaciones y asegurando una infancia saludable.
Estas vacunas, parte integral del Calendario Nacional de Vacunación, están disponibles de manera gratuita en centros de salud y hospitales públicos en todo el país. Este acceso facilitado garantiza que ningún niño quede desprotegido, independientemente de su situación económica.
