Pasado Perfecto Radio

10 canciones fundamentales para recordar a Freddie Mercury

Recordamos a una de las voces más prodigiosas en la historia de la música en el día en que hubiese cumplido 77 años.

  • 05/09/2025 • 13:47

Queen es uno de los pocos nombres del rock clásico en la que los cuatro miembros participaron individualmente en el proceso de composición. Pero ninguno contribuyó con más canciones o más éxitos que Freddie Mercury. Su singular voz e inimitable dominio del escenario y del público le valieron el estatus de ícono mucho antes de que el SIDA le robara al mundo su talento.

Además, como verán en nuestra lista de las 10 mejores canciones de Freddie Mercury en Queen, la música que creó con la banda conserva su atractivo que llena estadios y su brillo glamuroso décadas después.

1 “Bohemian Rhapsody” - (A Night at the Opera, 1975)

Freddie Mercury tenía la idea de esta canción, una pequeña suite de casi seis minutos, en la cabeza y en un puñado de pedacitos de papel garabateados. Se necesitaron tres semanas, cinco estudios distintos de grabación y la confianza ciega del resto de la banda para decodificar esa información y conseguir una de las canciones más emblemáticas de la música popular del siglo pasado. Construida a la manera de un patchwork sonoro, comienza como una balada y va creciendo en intensidad y distorsión, hasta derivar en un solo épico de Brian May, que es la invitación definitiva al “air guitar” y es el preludio perfecto a la denominada “sección operística”: una avalancha de voces superpuestas en 180 capas de falsetes y armonías, luego de la explosión rockera, y el headbanging inevitable, vuelve la calma. Todo deriva en un final lleno de nostalgia, que se desvanece en cámara lenta. 

2 “Love of My Life” - (A Night at the Opera, 1975)

Sentado al piano, tocando a tempo rubato, con guiños a compositores clásicos como Chopin o Beethoven, Freddie Mercury entregó “Love Of My Life”: una composición mayúscula. Sin embargo, acaso opacada por la opulencia de “Bohemian Rhapsody”, no fue un éxito inmediato. Freddie le dedicó la canción a Mary Austin, su novia de entonces. El vínculo entre ellos se mantuvo, haciéndole honor al título y al significado profundo de la canción. El acompañamiento del resto de la banda es supremo, incluso Brian May toca el arpa en algunos fragmentos.

3 “Killer Queen” - (Sheer Heart Attack, 1974)

Ante un hipotético mapa genético de la canción con la que Queen daría el salto a la masividad (llegó al puesto número 2 de las más escuchadas en el Reino Unido), el gen beatle adquiere un papel preponderante. Los coros de los cuatro integrantes y los aires de vaudeville o music hall, remiten a clásicos del grupo de Liverpool como “Penny Lane”, “Honey Pie” o “Lady Madonna”. Mercury la compuso en una noche, pero la grabación fue extensa, con varias capas de sonido superpuestas y un solo de Brian May que el propio guitarrista eligió (y elogió) como los mejores de toda su discografía. 

4 “The Show Must Go On” - (Innuendo, 1991) 

Una canción que funciona como un epitafio. Brian May aportó esta balada, que es la que cierra el último disco de estudio que lanzó el grupo con el cantante todavía vivo, en febrero de 1991. Es imposible no emocionarse al escuchar a Freddie cantar aquello de “Por dentro mi corazón se está rompiendo/ Mi maquillaje puede estar descascarándose / Pero mi sonrisa aún está”. Aunque estaba débil por su enfermedad, y apenas podía mantenerse en pie, logra una interpretación notable. La letra de algún modo refleja el espíritu de esas sesiones de grabación, con el grupo conviviendo en el estudio en un clima de comunión perfecta, alegría y buen humor.

5 “We Are The Champions” - (News of the World, 1977)

Comienza como una canción de redención, en un ámbito intimista, con una letra que habla de pagar deudas y cumplir condenas, pero el clima va in crescendo y pronto se transforma en una canción grandilocuente y épica, que viene acompañando los festejos de los equipos que ganan torneos (bueno, hasta que apareció “Muchachos”…). Completamente autorreferencial, Freddie Mercury se refería a él y su banda cuando cantaba que eran los campeones del mundo. No había referencia deportiva, era un gesto de revancha frente a buena parte de la crítica musical. 

6 “Crazy Little Thing Called Love” - (The Game, 1980) 

Un viaje en el tiempo. El primer single de The Game fue lanzado en agosto de 1979, el año anterior a la salida del disco, y es un homenaje al rock de los años 50. Un mito rodea a la composición de esta canción que se transformó en el primer hit de Queen en alcanzar el primer puesto del Hot 100 de Billboard en Estados Unidos: Freddie Mercury la compuso en un hotel de Múnich, mientras tomaba un baño de espuma, en apenas diez minutos. El sonido remite a las composiciones seminales de Elvis Presley, y una vez que escuchás la melodía, una de las más pegadizas de toda la obra del cuarteto, probablemente ya no puedas sacártela de la cabeza. 

7 “Somebody to Love” - (A Day at the Races, 1976)

¿Cómo ir un paso más allá de ‘Bohemian Rhapsody’ sin morir en el intento? Un año después del suceso de aquel tema operístico-experimental que marcó un antes y un después para la banda, Freddie Mercury intentó componer un tema que tomara ese lugar disruptivo en su nuevo álbum: A Day at the Races. Entre la balada romántica y la espiritualidad religiosa, “Somebody to Love” se consagró como uno de los mayores hits de Queen.

8 “Don’t Stop Me Now” - (Jazz, 1978) 

El vértigo del rock para Queen y la melodía épica al piano para la voz de Mercury se cruzan en esta canción editada por primera vez en 1978. La grabación estuvo tan al servicio del tema que Brian May, junto a su ego, entendieron la importancia de la base de bajo y batería y solo aparece con su guitarra para el momento del punteo. Es tan concreta y directa que, durante los años siguientes, fue utilizada en innumerables publicidades, series y películas. Los fans de Queen siempre la vincularon a la ruta, una canción perfecta para tu auto después de poner la palanca de cambio en quinta; y después imaginar la voz de Freddie Mercury como una estrella fugaz saltando por el cielo.

9 “Friends Will Be Friends” - (A Kind of Magic, 1986) 

Si creciste en la Argentina en los años 90, es imposible que al escuchar esta canción no toque tu memoria emotiva. Basta con oír los primeros acordes, con la intro de guitarra de Brian May, para visualizar a Carlín Calvo y Pablo Rago. Amigos son los amigos es el programa que desde la pantalla de Telefé capitalizó la popularidad de Queen y la proyectó hacia un público no iniciado. Escrita por Freddie Mercury en colaboración con John Deacon, es una oda a la amistad que también hace referencia a la crisis económica de 1985, cuando la libra alcanzó uno de los valores más bajos de la historia. La épica característica de la voz de Mercury, en este caso aplicada a una canción que es un abrazo.  

10 “We Will Rock You” - (News of the World, 1977)

Tribal, ceremonial, contagioso, minimalista y potente a la vez, esta canción de Brian May, que abre News of the World, está construida a partir de taconazos en el piso, golpes en el tambor, palmas, un coro y la voz de Mercury, que comienza lanzando un proto-rap y termina como el animador de un fan fest en la era del punk-rock. Dura apenas dos minutos, y la guitarra de Brian May irrumpe en escena al minuto y medio. Pero, claro, se lleva el protagonismo, con un estilo que parece evocar el sonido primitivo del “Jailhouse Rock” de Elvis Presley y el garagero de Ray Davies (The Kinks) en “You Really Got Me” y muta pronto hacia un estilo casi onírico, con alguna reminiscencia de la música de la India.